LOS MUNDIALES Y LA TRASTIENDA DE LOS HECHOS

Es cuestión de mirar hacia atrás. Mientras se desarrollaba el mayor encuentro del balompié en la Alemania capitalista de 1974, en Argentina se lloraba la muerte del Gral. Juan Domingo Perón. Y entre el fixture alemán y las honras fúnebres al tres veces presidente de la nación, ya se iban preparando los sectores de la antipatria para frenar tanto impulso revolucionario de una juventud que pensaba y peleaba por un país para todos. Cuatro años mas tarde esos sectores no solo asesinaban sino también rapiñaban y comenzaba el desmantelamiento del país al son de la Marcha del Mundial 78. Y cuatro años mas tarde, en pleno evento futbolero, nuestro país estaba en guerra con los ingleses. Los medios habían alentado que con aceite hirviendo y palos, se los corría. Asi nos fue. Tras la rendición el diario Crónica, estúpidamente titulaba: «Mano a mano, no nos ganaban».

Cuando el Circo de la Pelota, se mudó del potrero europeo y se vino a México, había en el país algo de democracia y mucho miedo por lo que ocurrió. De pronto el calendario de competencia, enfrentó a los seleccionados de Argentina e Inglaterra. Apareció la mano de Dios, el «barrilete cósmico» y toda una sensación de que le «mojamos la oreja» a los gringos pero hoy ellos están tratando de explotar el posible petróleo existente en adyacencias a nuestras islas. Somos «los campiones morales» desde el 66 cuando un referí alemán lo hechó al diputado, mandato cumplido, Ubaldo Rattín. Ex-jugador tirado a la derecha y ladero de un comisario represor.

En los 90 esperábamos otro campeonato en Italia, donde jugaba «el Diego», pero en la final los «panzer» alemanes le ametrallaron el tobillo al héroe de Villa Fiorito y nos quedábamos con el subcampeonato y encima comenzábamos a perder por goleada con en neoliberalismo de la mano de un mediocre jugador de fóbal, pero hábil para «empaquetar» a toda una sociedad con la supuesta Revolución Productiva que involucionó al país.

En el 94 a Maradona «le cortaron las piernas» con efedrina. Fue en el mundial que se realizó en la patria yanqui. Se perdió pero ya se estaba en el Primer Mundo y las «relaciones carnales» de muchos funcionarios eran lo cotidiano.

Después llegó Francia del 98 y  ya Carlos Menem no jugaba al fútbol sino al golf y en el próximo año sería derrotado por la Alianza.

El mundial del 2002 se hizo por primera vez, fuera del continente americano y europeo. El gran negocio se trasladó a Asia. Japoneses junto a los coreanos capitalistas montaron sus kioskos. Argentina tras ganarle a Nigeria, (como este sábado), perder con Inglaterra y empatar con Suecia quedó eliminada.

A la tristeza de quedar afuera se le sumaba la bronca de muchos ahorristas que quedaron encerrados en el corralito financiero. Otra treta mas del capitalismo para quedarse con lo ajeno.

En Alemania del 2006 no nos fue tan mal. Quedamos afuera en los cuartos de final. Se empató con el dueño de casa 1 a 1 y se definió por penales. Los alemanes inflaron cuatro veces los piolines de la red del arco, Argentina solo dos y a casa. Algunas cosas iban cambiando, políticamente hablando. Ya no liberalismo ni en el país ni en la Patria Grande.

En este mundial africano puede que el imperio haga enfrentar a las dos Coreas, mire para otro lado ante las trapisondas de su ahijado israelí. Mientras el mundo ve correr la pelota, se pierde tiempo, precioso tiempo para detener el desastre climático. o las hambrunas en África.También puede suceder que Leonel Messi haga un buen mundial y levante la copa y a aguantarlo al Diego. (Soñar no cuesta nada) Aunque el mejor campeonato es el lograr una patria grande y chica para todos. Hace 200 años que estamos en el intento….

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