El ministro padecía un cáncer gástrico que lo aquejó en los últimos meses y falleció hoy a las 16. Era uno de los ministros del Superior Tribunal, pero inició su carrera en 1970 y fue dejado cesante como juez en la última dictadura. En 2006 había asumido en el máximo tribunal, pero también fue constituyente y funcionario de Gobierno.
Fue larga su trayectoria en la Justicia. Mario Dei Castelli fue uno de los jueces misioneros echados por la última dictadura por negarse a reconocer al gobierno de facto. Había asumido como juez en 1975 y después de echado, recién en 2006 fue reivindicado cuando asumió como ministro del Superior Tribunal de Justicia, reconocido por todos los sectores políticos, salvo, paradójicamente, el radicalismo, que no votó su pliego, pese a destacar su dilatada trayectoria profesional. Ayer falleció, aquejado por un cáncer que lo tuvo a mal traer en los últimos meses.
Por su deceso, el presidente del Superior Tribunal, Rubén Uset decretó un feriado para todas las dependencias de las cuatro circunscripciones judiciales de la Provincia. Sus restos son velados desde anoche en el Salón Pilcomayo ubicado por calle San Martín de Posadas hasta las 11 de hoy, cuando será sepultado.
Hombre vinculado siempre a la democracia, en 1983, fue subsecretario del Gobierno durante los primeros tres años del mandato de Ricardo Barrios Arrechea y en 1994 representó al radicalismo de Misiones como convencional en el Congreso de Santa Fe, que reformó varios capítulos de la Constitución Nacional.
En 2006, asumió como ministro del STJ junto a Cristina Irene Leiva, Ramona Beatriz Velázquez, y Roberto Rubén Uset. Pero había empezado a ejercer la abogacía en 1970.
“Se nos fue un gran amigo. Siento una gran pena”, aseguró anoche Uset.
El presidente del cuerpo destacó , “la investidura y trayectoria” de Dei Castelli, y elogió su “labor cumplida y hombría de bien” en la Justicia, “destacándose en el cumplimiento de sus funciones por su capacidad y competencia jurídica, e intachable conducta funcional, sentido del deber y contracción a las obligaciones propias del cargo desempeñado”.
Fuente: Misionesonline
