Y cuando hablé de la Argentina políticamente blanca lo hice desde una concepción jauretchiana donde lo negro y lo blanco no pasaban por la piel sino por la lealtad a la clase social a la que se pertenece y por la adhesión a la visión nacional y popular de la política y de la vida.
No me extraña que se me tergiverse para intentar ridiculizarme, lo han hecho centenares de veces, con quienes se oponen a la visión de las patronales reunidas en Palermo, que -en boca de Biolcatti- sí pidieron la destitución de Daniel Scioli, hecho sospechosamente ignorado en su columna de hoy por el señor Van der Kooy.
Dejo constancia que tomé nota de la respuesta del poder económico que me contestó a través de una de sus voceras culturales, la señora Mirta Legrand, quien afirmó públicamente que ella era «rubia por fuera y por dentro».
A cada mentira de Clarín y Van der Kooy le ofreceremos posiciones claras y la tolerancia y el respeto por la verdad que él evidentemente no tiene.
Luis D’Elía
Presidente de la Federación de Tierra y Vivienda (FTV)
