TECNICOOP: Singular experiencia educativa, gremial y política cooperativa

“Una historia de búsqueda y encuentro de la dignidad humana”
POR: RAÚL RODRÍGUEZ SCHLECHTER Y ANA MARÍA RAMÍREZ ZARZA

“Una historia de búsqueda y encuentro de la dignidad humana”

POR: RAÚL RODRÍGUEZ SCHLECHTER Y ANA MARÍA RAMÍREZ ZARZA

Apreciados lectores…

En esta oportunidad, en esta segunda entrega, compartimos con Uds “La historia de TECNICOOP”, que  es ante todo, la historia de búsqueda y encuentro de la dignidad humana de sus componentes en un quehacer social sacrificado y comprometido con la construcción de una sociedad justa y equitativa.

Hoy veremos, cómo nace la idea en la mente de José Yorg de constituir una entidad cuyas caracteristicas son peculiares, y son peculiares porque las situación de las cooperativas formoseñas son pecualiares, al respecto iremos explicando estos aspectos.

Así que, partiendo de lo antedicho, destacamos nuestros aportes, nuestros esfuer
zos educativos, nuestras luchas,  todo con una absoluta coherencia doctrinaria desde el primer día de nuestra fundación institucional aquel  1° de abril de 1992 hasta hoy, proximos ya a cumplir 29 años de fructifera vida institucional con luces y sombras que lo  hemos  publicados en portales diversos, y en nuestras memorias institucionales están registradas.

Revista de Idelcoop – Año 1995 – Volumen 22 – Nº 90

https://www.idelcoop.org.ar/sites/www.idelcoop.org.ar/files/revista/articulos/pdf/95021701.pdf

TEORIA Y PRACTICA DE LA COOPERACION

                                                                 Tecnicoop Ltda.. Su Historia

Nace la idea

Parte 1. Entrega 2

Pero es en abril de 1992 “cuando la Iniciativa cobra mayor empuje y se proyecta hacia un quehacer más ambicioso dentro de un marco institucional definido”.

Debemos tener en cuenta que es esa época, por decirlo de alguna forma coexistíamos tres únicas camadas de la carrera universitaria y no habíamos logrado integramos a pesar de los intentos para ello.

Es así como surge la idea de crear un ente que nos nucleara, llevando a cabo numeroso contactos a fin de formalizar la integración de egresados y estudiantes, hecho que se concreta.

El 12 de abril de 1992, en dependencias de la Dirección de Cooperativas y Mutuales de la Provincia, a escasos días de que asumieran las nuevas autoridades del organismo estatal, se concreta la reunión formativa.

Fue de rigurosa necesidad un debate en torno a la problemática que presentaba el sector cooperativo y de la Inserción laboral y doctrinaria del Técnico en Cooperativismo.

Del análisis crítico surgieron con claridad aspectos negativos a revertir:

a)Las cooperativas se encontraban con cierto riesgo tanto empresarial como institucional- doctrinario de desaparecer.

b)Desconocimiento tanto por parte de la población en general, como por parte de las

diversas cooperativas del rol del Técnico en Cooperativismo por lo que no serian requeridos sus servicios.

e) La ausencia de una central intercooperativa que represente y luche por los intereses del sector cooperativo.

d)La falta de programas de educación cooperativa llevadas a cabo con creatividad, encarados tanto por el gobierno, como por las diversas cooperativas.

La nueva entidad toma en un primer momento la denominación de Tecnicoop Solidaridad Ltda. Cooperativa de Trabajo; más tarde cambiada por Tecnicoop Ltda. Cooperativa de Provisión de Servicios Cooperativos y Sociales. En sus primeros tiempos, la preocupación principal es obtener la matrícula respectiva no obstante el hecho de que el primer presidente, renunciante, es asesor de la Dirección de Cooperativas y se suponía que facilitaría tal anhelo.

Una circunstancia anecdótica es que, en la fundación del ente cooperativo se concreta un consenso con el Director de la Dirección de Cooperativas, a fin de coordinar un accionar conjunto a efectos de revertir la desastrosa situación del cooperativismo formoseño, acuerdo que luego fracasara.

Se fortalece la experiencia a través de la participación en congresos realizados en la República del Paraguay, como así también en provincias de nuestro país, en la que se ve la necesidad de una mayor presencia, con un compromiso más definido.

Si bien desde el principio existieron dos corrientes bien diferenciadas – en lo que a la línea política de acción se refiere – esto hace eclosión en un enfrentamiento que da como resultado la deserción de cuatro de sus miembros.

 Las nuevas autoridades asumidas a raíz de la renuncia y abandono deciden, ya libres de ataduras que impidan su accionar cooperativo, “recoger las experiencias acumuladas en esta corta vida institucional y encarar resueltamente la lucha por su reconocimiento legal” y paralelamente ganar representatividad como Interlocutor e Intérprete del pensamiento cooperativo formoseño.

Antes de continuar debemos aclarar que si bien ambas corrientes en un principio lograron mantener un equilibrio que permitió precisamente la conformación de TECNICOOP con las características que emanaban de un análisis objetivo de una realidad concreta de la vida de las cooperativas y del cooperativismo en particular en su aspecto doctrinal; no tardaron sin embargo en contraponerse.

Ellos sostenían una línea de acción, que podríamos llamarlo de «‘apostolate”, es decir, que a pesar de la tremenda realidad a la que nos enfrentamos y que era reconocida, propugnaban una acción cooperativa de tipo “lírico” por un lado, y por el otro “changaril”.

Lo que pretendían era “ir despacio no más”; “hacer la contabilidad”; “ganar unos pesitos”, en fin “ganarse un puestito en alguna cooperativa” . . y del aspecto social, qué? ….

¡En la senda de la lucha cooperaria, les abrazamos!

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