Gustavo Acuña es un sacerdote Diocesano que cumple su tarea pastoral en Asturias, al Norte de España. Por varios años desarrolló los productos del Instituto Provincial de Lotería y Casinos Sociedad del Estado (IPLyC SE), hasta que recibió “el llamado” para abrazar la vida religiosa. Días atrás regresó a la provincia para visitar a amistades y familiares que residen en la localidad de Bernardo de Irigoyen, y de paso por el Instituto, dejó un saludo fraterno a quienes compartieron con él, horas de trabajo.
Recordó que su estadía en la Lotería de Misiones se extendió entre el 2004 y 2008, lapso en el que realizó varias tareas que tuvieron que ver con la innovación tecnológica en los sorteos de los distintos juegos. Con un claro acento español, señaló que “fue una experiencia muy bonita. Compartí muchos momentos en los sorteos de la Quiniela Misionera, que estaba en pleno proceso de innovación”, dijo.
“Se pudo hacer un estudio, un equipo para comenzar a pasar las publicidades en la parte posterior de la pantalla y poder manejarlas desde acá. Estuve en la inauguración del Súper 9, La TV te llama y el Bingo Móvil, trabajando en la producción junto al equipo de Canal 12, ayudando a que se pueda innovar, a generar cosas nuevas. Fui encargado de hacer los videos para las ediciones especiales”, agregó.
Este productor y director para radio y televisión recibido en el Instituto Montoya, de Posadas, confió que a nivel personal “siempre tuve un camino de fe, de entrega al Señor, y la gente de acá era consciente de eso. Cuando vino el llamado fuerte para entregar mi vida a Cristo, quedó un vacío en mi corazón que lo llene con aquello que me pedía el Señor. Ahora soy sacerdote, en Asturias, donde tengo a cargo de 17 parroquias en un pueblo que se llama Panes”.
En el mes que duró su estadía, se hizo tiempo para todo. Primero llegó de visita a Bernardo de Irigoyen, donde viven sus padres; luego se trasladó hasta Chapecó (Brasil), donde tiene varios amigos, y pasó por Gobernador Virasoro (Corrientes) donde residen sus hermanas. “Estuve un mes y en este tiempo no paré. Me fui del país en 2008 y las veces que tengo la posibilidad, vengo”, manifestó, al tiempo que animó a la gente a que no “tenga miedo a seguir sus sueños, más aun si tienen que ver con el Señor. Él no defrauda y siempre espera lo mejor de nosotros. Yo siempre estuve ahondando en mi fe, viendo lo que Dios me pedía, y estoy muy contento con lo que hago”
