El presidente de la Cámara de Representantes, Carlos Rovira, exhibió ayer por primera vez el certificado de calidad en los procesos obtenido por el Parlamento Misionero, de acuerdo a la norma ISO9001 del Instituto Argentino de Normalización y Certificación (IRAM). Es la primera legislatura del país en contar con esta garantía de estandarización que asegura procedimientos de alta calidad y rapidez.
“Los misioneros podemos estar orgullosos que toda la gestión legislativa desde el inicio de cualquier trámite hasta, como hoy, la sanción de las leyes, está rigurosamente evaluada y sometida a un proceso de normalización”, anunció Rovira.
El legislador agregó que “se responden a parámetros de la norma internacional ISO que permite justamente cuantificar y estandarizar operaciones comunes en diferentes actividades para dotarla de un sentido de transparencia y sobre todo de calidad de gestión”.
De este modo, Rovira indicó que el parlamento misionero es “el primer Poder Legislativo del país en obtener esta certificación -incluso el poder Legislativo Nacional no lo tiene-”.
“La digitalización y más en general, la implementación y el uso de herramientas de gestión de última generación, van permitiendo conseguir objetivos. A esto se llama sinergia, cuando labores previas bien ejecutadas, bien llevadas a cabo, permiten que las futuras labores sean más fáciles”, definió el impulsor de este proceso de transformación.
En el mismo sentido de objetivos conseguidos y por cumplir, Rovira adelantó que “el edificio legislativo es la meta de fin de año, está muy avanzado –dijo-. Es una felicidad poder haber modernizado también este aspecto de la vida institucional política de la provincia; no tengo dudas que nos esperan nuevas décadas, donde el ejercicio del Poder Legislativo ha ganado en calidad en atención y en la elevación de las propias metas del legislador, que van más allá de incluso de la obligación constitucional”.
Dentro de las iniciativas no comprendidas en la ley fundamental se destaca la realización del Parlamento Estudiantil que para Rovira, pese a no estar incluido en la Constitución Provincial, “es una realidad que le permite a los jóvenes expresarse, anticiparse, y por qué no despertar la inquietud de convertirse en políticos que los necesitamos activos”, finalizó.
