Se inició el encuentro internacional de narradores, con participantes de Colombia, Buenos Aires, Córdoba y Misiones. Es el antecedente del Foro Internacional de Literatura y la reunión de cuenta cuentos Tutú Marambá. Mañana será día de talleres.
Con la divertido recorrido de la ratita Pipí Cucú en busca de su primer novio, a cargo de la narradora Gricelda Rinaldi, dio inicio el Encuentro de Narración Oral «A Puro Cuento» en su sexta edición, que cuenta con participación de cultores de la palabra llegados de Colombia, Córdoba, Buenos Aires y Misiones. Es organizado todos los años por la Biblioteca Pública de las Misiones del Parque del Conocimiento, y precede al “Foro de Literatura Infantil y Juvenil” y al encuentro de cuentacuentos “Tutú Marambá”.
Tras las palabras de bienvenida de Rinaldi, Érica Mogdans, directora del Centro de Archivo y Documentación de la BPM del Centro del Conocimiento, expresó que “el A puro cuento comenzó como una actividad previa del encuentro Tutú Marambá, la idea es incentivar la apertura de la imaginación y creatividad en los chicos. Y se da en conmemoración del aniversario de Hans Christian Andersen (Odense, 2 de abril de 1805, escritor y poeta danés, famoso por sus cuentos para niños), que da pie a la celebración del Día Internacional del Cuento Infantil”.
Luego de la apertura, los anfitriones dejaron paso a Marco Antonio Mosquera (Colombia), Marcelo Guerrero (Córdoba), Diana Tarnofsky (CABA), que sorprendieron gratamente a la multitud que abarrotó el Teatro de Prosa, con sus historias desopilantes. De esta jornada tomaron parte la Escuela 449 Barrio Rocamora, Instituto Posadas, Escuela 730, Instituto Cristiano y Escuela 827.
Guerrero se apropió de esa máxima que manejan los artistas narradores que combinan varias artes, “canto cuentos y cuento canciones”, munido de una guitarra empezó con una divertida canción y luego se dedicó a desgranar anécdotas de “cuando era así de chiquito, como ustedes” le dijo al público. A su turno, Tarnosfky llegó volando en un paraguas multicolor desde la capital argentina e hizo llover miles de palabras, con las que tejió y enhebró un maravilloso cuento, cerrando el colombiano Mosquera, que ya con su tonada particular se ganó la adhesión de los más de 500 alumnos de escuelas presentes.
Rinaldi, alma mater de los encuentros de narradores, dio muestras de su alegría en el inicio, “en época del discurso fragmentario y la dispersión que provocan las nuevas tecnologías, es maravilloso captar la atención de los chicos con una historia que empieza con la muletilla ‘había una vez’… arrancarles una sonrisa, una emoción, es lo mejor que te puede pasar”.
Sábado de talleres
