CLAUDIA LAZZARO: TRABAJADORA, SINDICALISTA Y FUNCIONARIA

Por Alejandra Benaglia   ***

Claudia Lazzaro es nacional y popular, tan amorosa como poderosa. “Esa chica tiene una fuerza!!”, me dijo una vez Dora Barrancos luego de escucharla en una entrevista. Y no se equivocó porque eso es lo que muestra: poder, seguridad, confianza y sororidad. Su trabajo en el área de Género y Derechos Humanos en el Sindicato de Curtidores la llevó a fundar, junto a otras representantes gremiales, el espacio de Mujeres Sindicalistas en la Corriente Federal de Trabajadores. Y desde la asunción del gobierno de Alberto Fernández asumió el desafío de ser la Directora de Políticas de Equidad, Formación Laboral y Cuidados, en el  Ministerio de las Mujeres, Políticas de Género y Diversidad Sexual de la provincia de Buenos Aires que conduce la también sindicalista, Estela Díaz.

Era una nena como todas, del barrio Los Árboles de Ituzaingo. Inquieta, jugaba a ayudar a su papá en el taller mecánico del barrio sosteniendo alguna tuerca o tornillo, apurando el trabajo para que la llevara rápido a la cancha. “Mi viejo era un laburante común, el mecánico del barrio -recuerda. La ceguera de mi mamá, que aún vive, nos llevo a criarnos con mi hermana mayor, que tomó el rol de cuidado.”


Claudia Lazzaro: trabajadora, sindicalista y funcionaria

La militancia le llego a los 14 años “recuerdo que empecé contra la reforma educativa del gobierno de Menem y Duhalde.  En la escuela técnica a la cual asistía,  a partir de esa reforma se fusionaban mecánica con electrónica y a partir de eso decidimos organizarnos. La escuela no tenía centro de estudiantes así que, sin saber que eso era comenzar a militar, fui aprendiendo colectivamente. Después me involucré en la política partidaria y en la política gremial. Lo primero en el ambiente gremial fue colaborar como estudiante secundaria en una olla popular de despedidos del Municipio del viejo Morón. Compañeros que pasaban como municipales a Ituzaingó y se encontraron con la pérdida de su fuente de trabajo. Estuvieron muchos meses resistiendo en la puerta y los que pudieron sostener la lucha hasta el final fueron reincorporados.

Ya en su inserción al mercado laboral en el rubro de curtidores accede al mundo gremial “empezamos a armar dentro del gremio de Curtidores un espacio de derechos humanos y después empezamos a pensar el tema de género y a ver cómo estábamos conformadas –nos cuenta. En nuestro gremio no había en ese momento un espacio donde las compañeras pudiéramos pensar, reflexionar  buscando un hilo en común que nos mostrara las dificultades que teníamos en el trabajo.”

En el 2016, en un contexto de endeudamiento externo y un proceso de enorme transferencia de riqueza desde el conjunto de los asalariados y el pueblo hacia los grupos dominantes que concentraban la riqueza de nuestro país, surge la Corriente Federal de Trabajadores y dentro de este espacio las mujeres de los distintos gremios que lo conformaban decidieron juntarse. Tres Encuentros Nacionales, tres cuadernillos de formación más uno próximo a salir y un proyecto de “Equidad de Géneros e Igualdad de Oportunidades en el trabajo” mostraron que las mujeres dentro del sindicalismo eran muchas y estaban buscando una participación activa.  “A mí me parece que las mujeres sindicalistas – asegura Lazzaro-  empezamos a construir, tomando siempre la lucha de quienes nos precedieron, un espacio en el que mostrar que la lucha no era por armar espacios de género, sino que era poder generar más cuerpo entre nosotras, mayor comunidad entre las militantes sindicales. Visibilizar a aquellas mujeres que ya estaban en los gremios y aquellas mujeres que querían empezar a transitar este hermoso universo que nos lleva a conquistar derechos para nuestras compañeras y compañeros.  El primer encuentro de mujeres sindicalistas fuimos más de 400 y en los siguientes miles. Vino Cristina Fernández de Kirchner, diseñamos el primer paro nacional contra las políticas de ajuste de Mauricio Macri, resistimos el quite de las moratorias previsionales y fuimos contra la ley de de equidad salarial presentada por ese gobierno demostrando que en realidad era una ley de flexibilización laboral que, además, se metía con nuestras organizaciones sindicales y en nuestro nombre pretendían intervenirlas. Hoy, gracias a que tenemos un grupo de diputados y diputadas sindicalistas en el Congreso de la Nación existe una ley de teletrabajo, cuando aquella ley de equidad nos exponía a que el patrón nos mandara a trabajar a casa sin ningún derecho. Dos años después de haber luchado en contra del quite de la moratoria previsional, el ANSES reconoce las tareas de cuidado de las mujeres. Tener a compañeras como Vanesa Siley en diputados nos demuestra que cuando habla una de nosotras hablamos todas.”

2019 y un nuevo gobierno popular crea el ministerio de mujeres, tanto a nivel nacional como en la provincia de Buenos Aires. Junto con este logro tan celebrado, Claudia Lazzaro es nombrada Directora de Políticas de Equidad, Formación Laboral y Cuidados, un cargo que le permitió trasladar a la gestión pública su experiencia sindical. “Cuando definimos que era lo que tenía que hacer la Dirección, descubrí que había muchas cosas que les fuimos diciendo a las mujeres sindicalistas – afirma. Los análisis que hicimos en los tres cuadernillos y todas las luchas se trasladaron al programa “Oficios sin prejuicios”, visibilizando la división sexual del trabajo, sus desigualdades  y como modificarlas. También creamos el sello  Construir Igualdad, que es justamente pensar la perspectiva de género en todo el mundo del trabajo, en particular en la industria y la producción, que son los lugares más masculinizados.”

Justicia social, soberanía política e independencia económica, son las banderas del peronismo. ¿Cómo se transversalizan con el género?
Cuando hablamos de justicia social, soberanía política e independencia económica, no podemos hacerlo de otra manera que no sea pensando en quienes componemos la sociedad sin importar el género. Obviamente que entendemos que hay desigualdades, pero nuestra doctrina es clara y debe poner de manifiesto todos los documentos de la compañera Eva Duarte de Perón, que llevaron a pensar a las mujeres en la acción política y en cada una de estas tres banderas que tenemos en el peronismo. Entonces no podemos hablar de peronismo si no hablamos de igualdad de género. Y en eso me parece importante y trascendental reivindicar a Eva con su rol de compañera sindicalista, reivindicarla con todo lo que significó en la emancipación de las mujeres, en cada uno de sus textos y en cada uno de sus discursos. Cómo trabajaba y cómo pensaba en la autonomía de las mujeres. No sólo en la autonomía política sino también y fundamental, en la autonomía económica.

*** Alejandra Benaglia
–  Periodista feminista. Delegada sindical. Columnista de Diario Digital Femenino

Mujeres Sindicalistas

alebenaglia@hotmail.com

Enlace permanente a este artículo: http://ellibertadorenlinea.com.ar/2021/10/03/claudia-lazzaro-trabajadora-sindicalista-y-funcionaria/