En las circunstancias actuales, con Argentina buscando salir del doble pozo recesivo a consecuencia del caos neoliberal y del provocado por la pandemia, es el momento para transformar las iniciativas estratégicas esenciales, en Políticas de Estado de prioritarias e innegociables concreciones.
Es un momento en el que hay que priorizar el desarrollo y la generación de empleo genuino.
En tal sentido, los ejes en nuestra secularmente marginada provincia, alejada del núcleo central siempre excluyente, de la Pampa Húmeda, pasan por dos sectores claves: la Energía y la Logística del Transporte.
ENERGÍA.
- Energía Solar como política de Estado provincial, es un craso error, totalmente desaconsejable.
No malgastar recursos y esfuerzos en una “solución” que no es tal. Es un salvavidas de plomo.
Explícitamente me permito sugerir, con el mayor énfasis, que se deje de lado el peregrino proyecto de “solución energética” mediante paneles solares, pues es una tecnología cargada de limitaciones técnicas, de alto costo real por kWh, inútil como energía de base, y seguramente con muchos componentes importados, por lo que tiene muy bajo efecto multiplicador en la economía y el empleo. No es ninguna solución, y al respecto puedo citar varios trabajos técnicos de OETEC (cuyo principal referente, Federico Bernal, forma parte del elenco energético nacional actual); el lapidario artículo de Página 12, del día 01/10/2020, referente a la pobreza energética de Uruguay, consecuencia directa de apostar a las “renovables” eólicas y solares; además de opiniones de destacados especialistas energéticos de nuestra provincia y otros del ámbito nacional (entre ellos el Ing. F.C. Rey, ex vicepresidente de la Comisión Nacional de Energía Atómica), así como varios artículos y partes de libros, de mi autoría. No me extiendo, en mérito a la brevedad, pero los antecedentes están a disposición, para ampliar el tema, lo cual en lo esencial hice en recientes artículos.
- La enorme riqueza hidroeléctrica de Misiones se sigue desperdiciando.
Es de gobernantes con visión de estadistas de fuste, la sin duda enorme tarea de concretar la utilización de nuestro vastísimo potencial hidroeléctrico, el cual puede clasificarse en dos grandes grupos:
a) las gigantescas hidroeléctricas binacionales de Corpus, Panambí y Garabí (cuyos estudios técnicos están totalmente terminados), -las dos primeras 100 % en Misiones en su parte argentina, y la tercera, a medias con Corrientes en su parte nacional-, cuyas regalías serán una fuente perpetua de recursos para las arcas provinciales, además de asegurar el suministro eléctrico en cantidad y calidad necesarias para el desarrollo;
b) las hidroeléctricas de mediana y baja potencia, en cursos de agua interiores, de las cuales hay siete proyectos terminados, más el octavo que es el del Túnel del Urugua-Í, el más factible de todos por su alta rentabilidad y nulo impacto ambiental.
Téngase presente que la energía más económica que dispone Misiones es la generada por la Hidroeléctrica Urugua-Í.
No se deben confundir los proyectos de mediano y bajo porte (viables en lo técnico, ambiental y económico), como son los estudiados, con las nulamente factibles microturbinas, inviables por carecer de escala que les permitan autosustentarse.
Las usinas hidroeléctricas en su momento estudiadas, pueden ser construidas por o con participación de empresas constructoras locales. Tienen gran efecto multiplicador en sus zonas de influencia y generan gran demanda laboral para ser construidas.
Además, serán reservorios de agua, con los cuales se podrán abastecer a localidades cercanas.
Será sin duda una gran tarea, de enorme valor estratégico, recuperar los ocho estudios terminados, en su momento totalmente financiados con fondos provinciales. Se está a tiempo de evitar que se pierdan para siempre.
Como sea, desde ningún ángulo coherente, resisten comparaciones los “espejitos de colores” de los paneles solares, respecto a ningún buen proyecto hidroeléctrico.
- La pronta y correcta concreción del GASNEA debe ser una prioridad de altísima relevancia estratégica, tanto para Misiones como la también excluida Corrientes; marginadas ambas provincias por el unitario criterio del neoliberalismo, vigente en los cuatro años precedentes.
El gas nacional y el que se importa de Bolivia, debe ser prioritariamente para abastecer necesidades nacionales, incluidas el consumo residencial y la reindustrialización, y solo el excedente para exportar en bruto.
El GASNEA debe construirse antes que el proyectado gasoducto a Brasil.
- Precios uniformes para los combustibles líquidos, tal como estuvieran vigentes en todo el país, antes de la irrupción de la doctrina neoliberal.
Esos precios uniformes de los combustibles, “achicarán” las distancias económicas de nuestra periférica provincia, haciendo un poco menos oneroso el transporte automotor de cargas y pasajeros.
LOGÍSTICA DEL TRANSPORTE.
- El Ferrocarril Mesopotámico, con todo su equipamiento e infraestructura renovados, es una imperiosa necesidad, para proveer un medio de transporte de grandes cargas y de pasajeros, en forme segura y económica.
Esta ambiciosa iniciativa excede el ámbito provincial, siendo en cambio una prioridad geopolítica de primer orden, la cual de concretarse como es debido, involucrara a cinco Estados componentes de la República Argentina (cuatro provincias más la Capital Federal (CABA), y la hermana república del Paraguay.
Su trazado, siguiendo a grandes rasgos el del hoy inexistente Ferrocarril General Urquiza, vinculará directamente a cinco ciudades capitales (Buenos Aires, Paraná, Corrientes, Posadas, Encarnación), e indirectamente a dos más (Santa Fe, Resistencia), estrechamente vinculadas en los grandes núcleos urbanos Paraná – Santa Fe y Corrientes – Resistencia.
Si bien las inversiones totales serán cuantiosas, debe tenerse presente que tanto China como Rusia ofrecieron facilitarnos los aportes tecnológicos y financieros imprescindibles para proyectos de esa envergadura, con financiaciones asequibles y posiblemente a ser abonados en parte o en todo, con producciones de nuestro país.
Posiblemente, existan otras grandes naciones como potenciales inversores para tan grande y muy relevante proyecto, que de concretarse será una excelente alternativa para mostrar al mundo, y en particular a Íbero América, los avances y capacidades de esas grandes potencias económicas.
Es sabido que el ferrocarril abaratará acentuadamente los muy elevados costos del transporte, hoy exclusivamente carretero.
- La Hidrovía, a la cual por primera vez se incorporó a nuestra provincia, debe ser la gran autopista fluvial, por la cual canalizar grandes volúmenes de mercaderías, a costos muy reducidos y por un medio altamente seguro, habida cuenta la muy baja tasa siniestral de este medio de transporte.
Además de ser la alternativa más económica para transportar grandes volúmenes de cargas, existe una muy interesante alternativa, para sumar otro atractivo turístico a toda la región. Poner en vigencia cruceros fluviales, que no necesariamente deben tener base excluyente en Buenos Aires, será un atractivo turístico muy importante, si se lo sabe promocionar debidamente, analizándose diversos trayectos alternativos. Además de algunos casos vigentes en Europa, cabe citar que Paraguay tenía o tiene vigente un servicio similar, que partiendo desde Asunción, remontaba el río Paraguay llegando prácticamente hasta el límite navegable, antes del Pantanal.
En lo referente al transporte fluvial de cargas, seguramente será muy positivo que Misiones cuente con más de un puerto operable, siendo emplazamientos posibles el nodo caminero de Santa Ana, Eldorado e Iguazú; además de Posadas.
- Autovías que nos conecten al país.
Parcialmente están construidas o en curso de construcción.
Deberíamos tener ese tipo de conectividad con el nodo Corrientes – Resistencia; con Paraná – Santa Fe (por la ruta 14); con Rosario (Ídem), y con Buenos Aires (ídem); además de nuestra ruta 12 troncal de Posadas a Iguazú.
- Línea aérea de fomento provincial.
Uniendo puntos distantes de nuestro territorio provincial, con pequeños aviones de hasta 20 pasajeros, facilitará las conectividades internas, y adicionalmente, puede ser un factor que impulse el turismo. El análisis del tema debe tender como mínimo a autofinanciar el sistema. El beneficio será dinamizar la economía y el contexto social.
Todas estas iniciativas tienen gran potencial multiplicador de la economía y del nivel de empleo.
Analista de Temas Económicos y Geopolíticos
