FMI Y EL VACIAMIENTO FÍSICO Y MORAL QUE LLAMAN «CRISIS»

Por Mempo Giardinelli ***

El gobierno de Cambiemos, en su absoluta insensibilidad social, muestra su verdadero rostro día tras día. El presidente Macri, su familia y sus amigotes, no sólo ejecutan políticas antinacionales y de destrucción del aparato productivo y del trabajo, sino que además aparecen coludidos en conductas delictuosas como las cuentas offshore, hasta ahora negadas pero ya inocultables según numerosas denuncias periodísticas responsables.

En ese contexto, llevan al país a la disolución nacional mediante la rifa de los recursos que son patrimonio de la ciudadanía, llegando incluso a la entrega territorial, lo cual conforma ya delitos supremos, como la Traición a la Patria. Y sumiéndonos a todos los habitantes, y en particular al pueblo trabajador, en el desconcierto y el desánimo porque sus provocaciones parecen orientadas irresponsablemente a reavivar rencores y furias que sólo conducirían a violencias que nuestro país ya padeció y nunca más quiere ni debe sufrir.

Por eso, lo que todos los economistas del sistema progubernamental y mediátcico llaman “crisis”, en verdad no es tal. La supuesta “crisis” es el nombre falso del descalabro económico y social que viene produciendo el asalto que ellos mismos provocaron –y profundizan día a día– sobre trabajadores, docentes, productores, pequeños y medianos empresarios, jubilados y también la juventud y los estudiantes. Asalto cuyo verdadero nombre es “vaciamiento criminal de una sociedad”.

A la desastrosa política económica que han impuesto en menos de tres años, que desconoce y niega al Congreso Nacional, achica la democracia y destruye la institucionalidad, ahora pretenden coronarla con la infame entrega de los destinos nacionales al Fondo Monetario Internacional.

Por eso el de Cambiemos, el Pro y el Radicalismo claudicante, es un gobierno traidor porque estafó a sus propios votantes y hoy los entrega indefensos al FMI, que es el peor poder global de la historia de la Humanidad, porque no es un banco –como se le quiere hacer creer a la población– sino un gigantesco poder extra y supranacional de dominación que fortalece a la oligarquía terrateniente y a las patotas judiciales para pisotear las instituciones republicanas y anular lenta pero sistemáticamente todos los derechos civiles y los derechos humanos de millones de argentinos y argentinas.

El llamado “préstamo stand-by” al FMI significa mucho más que tomar un crédito, de por sí impagable. En realidad es la entrega incondicional de nuestra Patria al capital financiero multinacional. Aunque siguen mintiéndole a la población, el FMI no funciona como un órgano que presta dinero para que alguna vez paguemos, sino para que cada vez estemos más sometidos a sus órdenes de nuevos ajustes y modificaciones de los derechos económicos y sociales que el pueblo argentino construyó en décadas de lucha.

El FMI es el verdadero poder que se ha instalado en el mundo, y ahora este gobierno de cipayos y ladrones acepta que nos impongan todas sus “condicionalidades”, que no son otra cosa que los mandatos de la ortodoxia neoliberal de achicamiento del gasto, disminución del salario, en particular de los jubilados, y ajustes uno tras otro para pagar la deuda que ellos mismos contrajeron y siguen contrayendo.

Este cuadro, dramático de por sí, es especialmente perverso si se recuerda que –si permitimos que llegue a imponerse– no sólo regirá el desdichado presente argentino sino que destruirá las bases de generación de conciencia que sólo puede crear, enseñar, transmitir y garantizar la educación pública, universal, gratuita y obligatoria.

Es en ese contexto, en mi opinión, que la docencia argentina, de todos los niveles, debe estrechar fuerzas para resistir patrióticamente el brutal ataque de este gobierno neoliberal y sus nuevos patrones, el FMI. Y esa resistencia consiste hoy y ahora en el rechazo a todos los discursos mentirosos que prometen una educación privatizada y arancelada, y que propagandiza las mentiras de la “calidad” y el “emprendedorismo”.

Todas esas basuras retóricas no son sino pantallas que ocultan el verdadero objetivo del FMI y del actual gobierno: que nuestro pueblo se embrutezca para perder y nunca más tener conciencia de sus derechos.

https://www.revistalabarraca.com.ar/fmi-y-el-vaciamiento-fisico-y-moral-que-llaman-crisis/

 

Enlace permanente a este artículo: http://ellibertadorenlinea.com.ar/2018/06/27/fmi-y-el-vaciamiento-fisico-y-moral-que-llaman-crisis/