¿Cuál es la importancia del avance aludido más arriba?
Que, en efecto, las cosas maduran a su tiempo y que el arte de vencer es la perseverancia, en las cosas buenas, en las cosas positivas, como me atrevo a considerar que el vocablo “cooperario” desborde ampliamente la significación que le otorgan en el diccionario castellano, allí, “cooperario” significa hombre que coopera. Sustantivo. Es una palabra llana de 5 sílabas. Procede del latín cooperarĭus. Nada más.
Se hizo imperativo, por tanto, que al mismo vocablo corresponda examinar cuál es la mejor definición política, puesto que asumimos una postura política ante las circunstancias en la vida y los significados de las palabras, sostenidos por las ciencias, y de tal modo entonces, definimos el carácter que debe tener el vocablo “cooperario” de acuerdo con nuestro ideal cooperativo.
Si se ignora cuántas formas de relación productiva registra la historia en la evolución organizativa socio-económica y además piensan que la actual manera productiva, que involucra a las figuras o categorías de “patrón o empresario” y del otro lado al “obrero o empleado”, es inconmovible, entonces no han aprendido nada de nada.
Ahora, un sitio en internet Diccionario Abierto y colaborativo acaba de aceptar la significación y en consecuencia consignaron, en espíritu y letra, al que le doy al vocablo “cooperario” en función a mi tesis:
Breve comentario introductorio sobre el término “Cooperario”: Me han puesto este sobrenombre en razón a que sostengo la tesis siguiente: Que, en una etapa superior de desarrollo de las actuales sociedades, es decir, de su forma, o manera de organización, ya no presentarán divisiones sociales tal como es en el presente y el pasado, de manera controversial, sino que, será de manera equitativa y armónica, ya no habrá patrones y trabajadores. Esta situación de relación hoy se encuentra en las cooperativas de trabajo. No es un sueño, una utopía alejada de la realidad.
En las entidades cooperativas, que se rigen y organizan a la empresa en la que todos son asociados, con iguales derechos y obligaciones, todos están en condiciones de asumir la dirección o control de la misma, las figuras de “empleado” o “trabajador” y de empresario” o “dueño”, se diluyen mutuamente, se agotan, se consumen.
Ese hecho, que no es un mero hecho, sino que es de derecho y como tal, tiene consecuencias jurídicas determina que la relación en la cooperativa entre los asociados emerja una nueva categoría, “la cooperaria” Todos trabajan, todos son empresarios, al amalgamarse estas dos figuras o categorías, al fin, desaparecen esas dos figuras primitivas y surge la figura del futuro pero que hoy ya se da, el Cooperario.
Y sintetizo: ”
“Habrá cooperarios cuando no exista el patrón y los obreros, existan los cooperarios, aquellas personas que son asociadas y aportan su esfuerzo en una cooperativa son cooperarios. Esta descripción emerge de la Doctrina cooperativa, pero también desde el Derecho, del ordenamiento jurídico que reconoce y registra estas entidades bajo sus propias reglas. (https://www.significadode.
No reclamo ninguna autoría o descubrimiento inédito sobre este significado del vocablo, de ninguna manera, puesto que es enorme la cantidad de conocimientos y aportes intelectuales a la humanidad que hacen referencia en muchas formas y maneras a la evolución social, dado como expresa una cita de Aristóteles (384 a.C. y 322 a.C.) “La inteligencia consiste no sólo en el conocimiento, sino también en la destreza de aplicar los conocimientos en la práctica” Esa es nuestra intención, un aporte.
El sociólogo Fernando Escalante Gonzalbo nos advierte en su artículo sobre “La ciudad del sol” (2016) de Tomás Campanella, que “Utopía es un lugar que no existe. Bien. Se sabe desde un principio que es un orden quimérico, imposible de poner en práctica. No obstante, también se supone que es un orden deseable, en que se han corregido todos los defectos de éste. Y por eso la utopía sirve como crítica del orden vigente, y como aspiración —o como justificación de una aspiración”.
La utopía también es una guía, también es una idea-fuerza, para avanzar en la mejoría humana y la forma de organización socio-económica, en su modelo de relación productiva más justa y proporcional de los bienes alcanzados como lo es sin dudas en la cooperativa.
Es dable concordar con los conceptos del Papa Francisco cuando alude que “La promoción de la economía solidaria es, sin duda, una de las más sólidas propuestas frente a la economía del descarte”. Marca indubitablemente la necesidad de evolucionar para superar al capitalismo.
¡En la fraternidad, un abrazo cooperativo!