por Actualidad Sur
La escuela 698 «Sarandí histórico» parece ser un objetivo constante para los vándalos y ladrones. El fin de semana pasado atacaron cuatros salas donde destrozaron material pedagógico y rompieron vidrios de las ventanas.
La comunidad educativa se mostró consternada. En lo que va del año, es la tercera vez que ocurre un hecho vandálico. En el 2014 malvivientes habían incendiado el kiosco escolar
Según testimonios que logró rescatar este medio, el ataque habría ocurrido durante el fin de semana, en que no hay actividad escolar y no habría sido hasta la mañana de este lunes cuando los docentes se presentaron a iniciar una semana laboral cuando se encontraron con la desagradable sorpresa de que las aulas otra vez habían sido blanco de vandalismo.
No saliendo de su asombro, las educadoras procedieron a recorrer las instalaciones constatando los daños en cuatro aulas, una de las cuales pertenece al nivel inicial.
Entre los destrozos sobresalen: vidrios rotos, material pedagógico hecho añicos, puertas violentadas. Pero no conforme con eso, los desconocidos vertieron parte de un material de limpieza de grifería sobre el piso de una de las salas y arrojaron el control remoto de uno de los aires acondacionados (adquirido con fondos de la cooperadora escolar) al patio.
Todavía está latente el recuerdo amargo del kiosco totalmente incendiado, en el 2014, oportunidad en la que las llamas se expandieron dañando parte del SUM escolar y la Biblioteca. Como en ese entonces, un episodio llevado a cabo por desconocidos,quienes amparandose en los beneficios de la oscuridad descargaron toda su furia contra un bien público. Cuatro años después, ese ensañamiento aún persiste.
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