TRAS JORNADA VIOLENTA, CIERTA CALMA EN CAPITAL PARAGUAYA



Por Prensa Latina

Luego de una tarde y noche de violencia el viernes, extendida hasta la madrugada de hoy, reina cierta calma en esta capital tras el amanecer, pero la situación es algo confusa por el cruce de informaciones contradictorias.


Lo cierto es que se registró la muerte de un hombre cuando en las primeras horas del sábado la Policía entró por la fuerza a la sede del Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA), hay más de 200 detenidos, un número impreciso de heridos y grandes daños.

El fallecido fue un dirigente juvenil de esa organización que recibió un disparo en la cabeza dentro de la sede partidaria, en una acción por la cual se dice que hay cuatro uniformados aprehendidos.

La mayoría de los lesionados fueron producto de la represión policial, aunque varios agentes también fueron remitidos al hospital, en un enfrentamiento inicial ante la sede del Congreso que derivó en un voraz incendio en ese edificio.

El comienzo de los problemas ocurrió en la tarde del viernes cuando cientos de personas se movilizaron hasta las inmediaciones de la sede congresal en protesta por la aprobación poco antes de un proyecto de enmienda constitucional.

Un grupo de 25 senadores, mayoría de los integrantes de la Cámara alta, repitió entonces una votación irregular sin el aval de la máxima directiva ya realizada el pasado martes para decidir cambios al reglamento interno.

Ahora fue para la enmienda que conduzca a insertar la figura de la reelección presidencial en la carta magna, cuyo sufragio se efectuó fuera del salón plenario, en el local de la bancada del Frente Guasu.

Fue así porque el presidente del Senado, Roberto Acevedo, se había negado a convocar a una sesión extraordinaria para ese fin, como mismo pasó hacía tres días.

Los manifestantes contrarios a ese hecho, que lo califican de golpe parlamentario, fueron atacados por efectivos antimotines con balines de goma y chorros de agua.

Entre los heridos entonces estuvieron el titular del PLRA, Efraín Alegre, y un diputado de esa formación opositora, con una lesión de cierta gravedad en el rostro.

Cuando fue sofocado el incendio y una frágil tranquilidad empezó a prevalecer, grupos de personas se trasladaron a diversos puntos del Microcentro asunceno y cometieron actos de vandalismo, pues se afirma que fueron sujetos infiltrados en la movilización de protesta.

Allí la Policía arremetió contra los sujetos que cometían desmanes sin tener nada que ver con la manifestación anterior, con daños ocasionados a varios locales comerciales de la zona.

Posteriormente ocurrió el allanamiento violento de los efectivos al local de la agrupación liberal, segunda fuerza política del país, con el saldo mencionado.

Los medios de prensa, incluidos espacios televisivos inusuales para un sábado, hacen recuentos de los hechos, pero en ocasiones se contradicen unos a otros cuando ofrecen informaciones específicas.

No obstante, está confirmado el complejo panorama imperante, sobre todo porque ya se habla de la incursión en esta capital de movilizados desde diferentes puntos del territorio nacional para continuar el rechazo al nombrado golpe parlamentario.

Sus integrantes pertenecen a los sectores opuestos a la enmienda constitucional y la consiguiente aprobación de la reelección presidencial, cuya decisión debe darse mediante un referendo popular.

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