“El arte de gerenciar el poder”, fue presentado el viernes en el Centro del Conocimiento. La periodista Teté Coustarot destacó que, “aunque en el Poder Legislativo se ejercita más el disenso y se tiene que convivir con la oposición, en el libro hay una mirada puesta en tratar de conciliar, generar y construir consensos”.
La autora, al referirse al título de su libro consideró que, “cuando el político compromete su vida, sus sueños y acciones con un proyecto, esa habilidad que tiene como político, no está dada solamente por su razón, sino que proviene de un ámbito muy sensible y exquisito que es el ser interno, porque el político que diseña un proyecto, no construye, es en realidad un artista que está creando, porque la obra existe en su interior antes de verla”.
“En la búsqueda de poder dimensionar el componente humano en el ejercicio del poder realicé una puesta en valor de las acciones identificadas con un político, Carlos Rovira; a quien admiro, no solamente como político, sino como persona, como ser humano; además el libro tiene un agregado importante, el prólogo fue escrito por Carlos Rovira”, señaló.
Britto explicó que, “el libro tiene dos partes; la primera, una parte política que está escrita entendiendo que el poder y la política tiene que ver con un fin, estar al servicio del bien común; son categorías de donde vienen todas las decisiones que transforman las vidas de las personas, desde decidir la construcción de un hospital hasta la sanción de una ley que impacta en la vida”.
“En la segunda parte, hago algunas reflexiones acerca del derecho parlamentario, es el primer Reglamento de Cámara comentado de Misiones, lo considero una herramienta útil para estudiantes, operadores legislativos y diputados; hay diez años contados con sumo detalle, también hay jurisprudencia y doctrina parlamentaria”, agregó.
“Tenemos que trabajar para llevar la política a la categoría más alta, esa es la reflexión del libro, hacer uso y ejercicio del poder para generar cambios y transformaciones desde los valores y desde una política más humana”, expresó.
La autora manifestó su alegría por “este nuevo desafío, y por poder abrazar con tanto amor un proyecto político que permite tener la esperanza de que a los misioneros nos quedan todavía los mejores tiempos”; también expresó su agradecimiento a su familia, amigos, compañeros de trabajo y a los que colaboraron para hacer realidad su primer libro, “El arte de gerenciar el poder”.
