LA EDUCACIÓN EN MISIONES Y LA ESTADÍSTICA DEL ERROR



por Aníbal Silvero

En el año 2013, el Consejo General de Educación de Misiones sacó una Resolución que establece que los estudiantes secundarios de esta provincia aprueban una materia sin importar si desaprueban en cualquier trimestre, incluso el último, que es el integrador, con tal que logren un promedio general de 6 o más. Es decir, si el alumno sacó un 9 en un trimestre y 8 en otro, podrá sacar un 1 en el último y aprueba la materia. O bien podrá sacar 1 en el primer o segundo trimestre, o 2 o 3, lo único importante es promediar 6.alumnos-de-misiones--(1)

Una resolución tan tremenda, suponiendo que fuera acertada, podría plantearse antes de comenzar el año, digamos en febrero, para que los docentes sepan con qué herramienta trabajarán durante el año, en cambio esta Resolución fue aprobada ¡antes de finalizar las clases!

Resumiendo, la enseñanza provincial dice tácitamente, que con saber los temas de dos trimestres basta para aprobar la materia, pudiendo no saber absolutamente nada de uno de los tres.

Ahora, hay materias que son de aprendizaje escalonado, como el caso de Matemáticas, no puede un profesor de Matemáticas darse el lujo de decirles a los alumnos: «si no sabés ejercicios combinados no importa, el año que viene todo se te aclarará». Lo más probable es que el año que viene se le complique más aún. Ni hablar de los colegios de enseñanza técnica. Los títulos habilitantes que se entregan en dichos colegios tienen responsabilidad civil y penal, y además tienen validez nacional.

Ahora, no sé si este es el caso, pero uno de los trucos más viejos en Estadísticas y Censos es cambiar los valores de la muestra para mejorar la cifra final. ¿Qué significa esto? Vamos a un ejemplo concreto. El año que se «decidió» que el sida podría significar millonarias cifras para la medicina y un excelente control de natalidad, la OMS definió como enfermos de sida en África a las personas que tuvieran los siguientes síntomas: “fiebres prolongadas durante un mes o más, pérdida de peso de más del 10% y diarrea prolongada “. Así es como, de repente, de la noche a la mañana, África pasó a tener miles de enfermos de sida. Así funcionan las manipulaciones estadísticas.

Veamos ahora el aspecto político. Bajar el nivel de repitencia de una provincia suena muy bien en las estadísticas nacionales. De hecho, en el Mapa Educativo Nacional, la tasa de repitencia en Misiones desciende en 2013. Nuestro gobernador, puede citar esta cifra en algunos de sus discursos mediáticos. Es cierto que con esta Resolución se disminuye la cantidad de repitentes en Misiones, pero la pregunta es ¿a qué precio?

En declaraciones radiales, el responsable de esta Resolución, Adolfo Safrán, un contador que hasta 2012 estuvo en el Organismo que regula los juegos de azar en Misiones, el Instituto Provincial de Lotería y Casinos, y ahora por enroque político está a cargo de la Presidencia del Consejo General de Educación, dijo que estudiarán dar marcha atrás a la medida en 2014, tal vez a mediados de año. Si la cosa se demora, 2013 y 2014 darán excelentes cifras de baja repitencia en la Provincia, lo que es un orgullo para muchos, y seguramente se recibirá 2015 con estos preciosos números bordados en discursos de campaña. Una elegante forma de demostrar que la educación en Misiones está mejorando. Y un 2015 de elecciones provinciales y nacionales con los números de la Educación brillando en bronce.

Paradójicamente, Misiones fue la primera provincia argentina donde votaron los menores de 16 y 17 años en una elección democrática. Y esto es una apuesta, se entiende, en consonancia con el pensamiento nacional, donde los jóvenes están cada día más preparados para el futuro que ya llegó. Donde la capacitación, el estudio y la formación de los chicos se perfeccionan cada vez más. Pero si seguimos nivelando para abajo con estas medidas, le estamos diciendo a nuestros jóvenes: «tranqui nomás, no hay problema con estudiar este trimestre, está todo bien», aunque en el fondo sepamos que nivelar para abajo no tiene retorno.

La educación no es un tema menor en la vida del hombre, y de la humanidad toda. Digamos, para ser sintéticos y contundentes, que sin educación, tú no estarías leyendo este artículo ni yo lo estaría escribiendo.

Ahora bien, toda estadística está vinculada a otra, y eso es lo verdaderamente preocupante. Si, por ejemplo, permitimos que promocionen arquitectos que no sepan de bases de hormigón, tendremos en Argentina más arquitectos, pero también más accidentes con construcciones edilicias. Si damos el título de Medicina a alguien que no estudió cirugía, tendremos más médicos en nuestro país, pero también aumentarán los muertos en quirófano. En este caso en particular, todo parece color de rosas: el chico pasa de curso contento, los padres están felices, los profesores le felicitan, disfruta tranquilo sus vacaciones y la algarabía reina en el aula y en la casa. Pero en algún momento de la vida, comenzando por el cursillo de ingreso a la Universidad, este castillo de naipes se va a desmoronar.

En los últimos días de clases, Safrán difundió por todos los medios a su alcance su interés de ser intendente de Apóstoles en 2015. Claro está, los números le cierran. Pero sucede que -en este caso- ése es justamente el problema.

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