El presidente de la Cámara Argentina de la Construcción, Carlos Wagner, anticipó que el secretario de Obras Públicas, José López, y el director ejecutivo de la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES), Diego Bossio, le informaron que la Anses (el organismo que maneja los fondos jubilatorios) aportará este año unos $7.000 millones para planes de viviendas y de infraestructura vial, y una parte de esa cifra se aplicará a la construcción del GNEA.
Acuerdo con Bolivia
Mientras tanto, en país del altiplano, Bolivia y Argentina acordaron el martes pasado incrementar los envíos de gas boliviano a nuestro país a 27 millones de metros cúbicos diarios (MMCD) hasta 2017, compromiso que será plasmado en una adenda al contrato de 2006 que se prevé sea firmado en las próximas semanas.
El vicepresidente boliviano Álvaro García Linera explicó que se avanzó en la negociación y el acuerdo prácticamente fue cerrado, en una reunión con el ministro de Planificación de Argentina, Julio de Vido, celebrada en Tarija.
García Linera indicó que en la reunión se subsanaron las “dificultades” que tenían sobre el documento las empresas estatales Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) y Enarsa de Argentina, que vienen negociando el convenio desde hace ocho meses.
El próximo 26 de marzo, según YPFB, las empresas podrían firmar la adenda al contrato en presencia de la presidenta de Argentina, Cristina Fernández, y de Evo Morales en Sucre o Tarija.
El Vicepresidente explicó que el incremento en las exportaciones de hidrocarburos se llevará a cabo de forma gradual: de 5 millones de metros cúbicos actuales se pasará a nueve, después a 16 en 2013 y finalmente se llegará hasta los 27 millones de metros cúbicos diarios en 2017.
Con la adenda, Bolivia modifica los plazos para incrementar los envíos. El contrato firmado en 2006 establecía que Bolivia exportaría 27 MMCD hasta 2017.
Garantías y gasoducto
Además del acuerdo de volúmenes, que dará vía libre a las inversiones de las operadoras, también se determinó que es indispensable el tendido del gasoducto que será denominado Juana Azurduy de Padilla a ambos lados de la frontera boliviano-argentina. Esta línea de transporte era conocida como el Gasoducto del Noreste Argentino (GNEA).
García Linera subrayó la necesidad de la construcción del gasoducto, si bien no detalló quiénes harán esas inversiones.
Además remarcó que “en esta adenda no se toca el precio”, 6,98 dólares por millón de BTU, del gas que compra Argentina.
Una parte fundamental de la adenda establece unas “garantías mutuas de cumplimiento de los acuerdos de provisión y de compra” entre ambos países.
En la cita de Tarija, las delegaciones también ratificaron el financiamiento argentino para la planta separadora de líquidos.
Piden apurar inversiones
El vicepresidente Álvaro García Linera pidió a la empresa hispano argentina Repsol YPF y a la británica BG Bolivia que aceleren las inversiones necesarias en el yacimiento de Margarita para que aumente la producción del gas natural que irá para Argentina.
Repsol YPF y BG detentan cada una un 37,5 por ciento de ese campo mientras que la firma Pan American Energy (PAE), filial de la también británica BP, posee un 25 por ciento.
“No existe ningún obstáculo y les pedimos que las inversiones comprometidas las hagan de manera inmediata. Es su obligación y como Gobierno vamos a exigirles que estas inversiones se realicen tanto en la planta separadora (de gas) que se tiene que construir, como en la perforación de nuevos pozos”, dijo.
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