Toda la carne en el asador

Dicho sea de paso, al conglomerado opositor no termina de convencerlo la posición ambigua de ciertos obispos en el tema de la Ley de Medios. En estos días, por ejemplo, Agustín Radrizani, obispo de Mercedes—Luján y presidente de la Comisión Episcopal de Comunicación Social, en su intervención durante la audiencia pública realizada en el congreso para discutir el proyecto de ley, consideró “de máxima importancia que el debate se de en un contexto de racionalidad en el que se garantice una participación plural de los ciudadanos y se evite cualquier manipulación de la información para beneficio de unos pocos”. Asimismo señaló que “es tan importante cuidar que la economía no maneje la política de la comunicación como cuidar que la política no busque intereses ideológicos ni económicos en la utilización de los medios”. Finalmente Radrizani subrayó –incluso levantando levemente la voz—que “es primordial velar entre todos para respetar el espíritu en que la ley fue concebida. La participación plural y democrática deberá aparecer en el tratamiento y reglamentación de la ley, como también en su aplicación”. Digamos, de paso, que la Iglesia católica tiene más de 1.200 radios “truchas” en el país, cuestión que podrá resolverse a la luz de la nueva ley, que dará cobijo legal a esas emisoras. En las filas de los que pegan fuerte contra el proyecto de ley de Medios revistan las principales cabeza de la Mesa de Enlace. Personajes como Hugo Biolcatti, Eduardo Buzzi y Alfredo de Angeli compiten con la derecha política a la hora de acusar al gobierno de “chavista”. Incluso repiten como loros los dichos del columnista de La Nación, Morales Solá, quien en uno de sus últimos escritos domingueros afirmó que “Venezuela, la Argentina, Ecuador, Bolivia y Nicaragua tienen gobiernos democráticos por elección, pero están perdiendo esa condición en el ejercicio del poder”. No por casualidad, ese es el mismo argumento utilizado por los golpistas en Honduras y será el eje ideológico del encuentro de la internacional derechista que en las próximas horas se reunirá en Buenos Aires, entre los que descuellan los demócratas amigos de Macri y de Narváez, José María Aznar, Mario Vargas Llosa y Marianito Grondona. Eduardo Buzzi, ex dirigente combativo de la otrora combativa Federación Agraria Argentina, organización famosa entre otras cosas porque supo protagonizar el emblemático ”Grito de Alcorta”, ya no se priva de mostrar las intenciones finales de acciones como el último lockout que, por la indiferencia de los chacareros, pasó casi inadvertido. Para maquillar el fracaso, Buzzi dijo que “lo que iniciamos es mucho más que una protesta, es un proceso gradual que apuntará a llegar a diciembre con una fuerte movilización para gritar fuerte contra la votocracia que se viene “ ¿Votocracia que se viene? ¿A qué se refiere el chacarero Buzzi? ¿Se trata de una amenaza al futuro funcionamiento del Congreso Nacional?. El pool mediático y la derecha política están dispuestos a recurrir a cualquier recurso con tal de producir el desgaste del gobierno de Cristina, como lo dijo no hace mucho Eduardo Buzzi. En este contexto se puede llegar a entender el disparatado operativo de la Afip contra Clarín, algo que –sin lugar a dudas—perjudica al gobierno nacional justamente cuando se está por sancionar la nueva ley de medios. Como se sabe, concluida la ronda de audiencias, la Casa Rosada está dispuesta a introducir modificaciones en los puntos del proyecto que suscitaron más cuestionamientos, como la autoridad de aplicación o el acceso de las telefónicas al mercado. Pero lo ocurrido, es un espaldarazo a quienes conspiran desde todos los ángulos contra la citada ley. Algunas fuentes insisten en atribuir el hecho a un operativo organizado por hombres que pertenecen o pertenecieron a la SIDE. Por ahora, en una primera investigación trascendió que la lupa recae sobre el responsable del operativo, Andres Vazquez, jefe de la regional metropolitana. Vazquez fue uno de los funcionarios que Ricardo Echegaray apartó al asumir en la Aduana, junto con Carlos García Lorea, según recordó el periodista Martín Granovsky en 2005, cuando se descubrieron las valijas con cocaína que Southern Winds transportó hasta Madrid. García Lorea hizo la carrera en el organismo fiscalizador vinculado con la SIDE y fue subdirector de la Aduana cuando el director era el actual gobernador de Chubut, Mario Das Neves, quien ya anunció con bombos y platillos que los diputados de su provincia se opondrán a la ley audiovisual.

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